El desfile diurno de Barberá

   Ya hemos hablado de todo lo que sucedió en Barberá excepto del desfile del Domingo por la mañana, de lo que hablaremos a continuación. Empezaremos hablando del tremendo calorque hizo en Barberá ese Domingo. La solución de echarse crema ultraprotectora parecía no ser suficiente porque según palabras de los protagonistas: " tengo la cabeza tan caliente que podría freir dos huevos fritos en un tiempo record". Menos mal que la camadería lograda la noche anterior con el grupo local de giganteros provocó que estos ayudaran a los de Leganés con el regalo de unas gorras para protegerse del calor:

                              

   Estas gorras supusieron la salvación de la secta vampírica de Leganés, pudiendo salir así en el desfile y evitando el descubrimiento de su engaño. Como muestra un botón:

                              

   Nótese como se ponían la gorra torcida para provocar la mayor sombra posible en la cara. También se puede ver como los más previsores ya llevaban gorro de casa.

   Avisamos que mañana podréis leer el capítulo final sobre la entrada de Samuel en el programa de protección de testigos. Dejamos para la próxima semana el estudio sobre los diferentes dioses vampíricos y los diferentes motivos por los que los sacan en procesión.

   Gustavo, el reportero más dicharachero.

   PD: Dedicado al yogurin del grupo, más conocido como "El abonado naranja", si quieres ver las andanzas de tu personaje favorito desde otro punto de vista entra aquí(enlace usufructuado del blog de JotaCe, weblog por otra parte muy recomendado, sobre todo si tienes la mirada sucia, y todos sabemos que la tenéis).